viernes, 12 de marzo de 2010

GREEN ZONE (DISTRITO PROTEGIDO) con MATT DAMON

FICHA TÉCNICA

Título: Green Zone: Distrito protegido
Título original: Green Zone
Dirección: Paul Greengrass
País: Francia, Reino Unido, Estados Unidos, España
Año: 2010
Fecha de estreno: 12/03/2010
Duración: 115 min.
Género: Drama, Bélico
Calificación: No recomendada para menores de 18 años
Reparto: Matt Damon, Jason Isaacs, Greg Kinnear, Brendan Gleeson, Amy Ryan, Khalid Abdalla, Antoni Corone, Yigal Naor, Sean Huze, Said Faraj
Distribuidora: Universal Pictures
Productora: Universal Pictures, Working Title Films, Studio Canal, Relativity Media, Antena 3 Films, Piel De Toro Productions

SINOPSIS

El 20 de marzo de 2003, un ejército internacional formado principalmente por soldados estadounidenses comenzó la invasión de Irak. Fueron unos días de caos absoluto en mitad de una frenética carrera por llegar cuanto antes a Bagdad. Mientras tanto, el subteniente Roy Miller (Matt Damon) y sus hombres recorren el desierto en busca de armas de destrucción masiva, sin saber que están a punto de caer en una trampa mortal.

CRÍTICA

El director Paul Greengrass parece haber hecho un nexo de unión con el actor Matt Damon, ya que tras coincidir ambos en dos de las entregas de la trilogia de Bourne, ahora vuelven a unirse para ofrecernos este thriller bélico de denuncia. El problema radica en que son mejores las intenciones que el resultado final, aunque también depende de las preferencias del espectador.

En mi caso particular todos los géneros que giran sobre los mismos patrones (por ejemplo el western) generalmente se me suelen hacer cansinos, a menos que me ofrezca algún detalle novedoso. Eso me pasó con los films de Bourne, que capturaban el espíritu de las películas de espias de los años 70 (con su contrapunto más o menos realista frente a la cada vez más fantástica serie Bond) pero actualizando su estilo. Por contra aqui nos encontramos ante un film cuya base es tan reciente (la Guerra de Irak del 2003) que no existe novedad en el producto final, el cual se transforma en una extensión de cualquier noticiario de la época (e incluso que me atrevería a decir que de la actualidad, ya que los pocos años transcurridos no han cambiado mucho la situación en el pais)

Pese a ser tema ya conocido es cierto que se valora el relativo valor del film al denunciar que los Estados Unidos se metieron en este conflicto porque les dió la gana, sin una información contrastada y veraz. A eso sumaría la labor de su protagonista, un Matt Damon que parece heredar el personaje de Bourne y llevarlo hasta el ejército (lástima del resto de actores, en papeles muy secundarios). Pero el film peca de unas escenas de acción en el estilo confuso tan en boga hoy en día, que a espectadores sensibles les puede acabar mareando y que apabulla pero sin aportar nada que las hagan especialmente destacables.

Y volviendo a lo que he citado antes, entonces... ¿que aporta Green Zone al cine bélico, o incluso diría que al thriller? Tan sólo da una opinión sobre unos sucesos, los cuales se nos muestran de manera más o menos realista pero tal y como ya se hartó uno de verlos en las noticias de entonces (y de ahora). Además el ritmo no es tan activo como los trailers previos daban a entender, teniendo momentos en que la trama se vuelve pesada, por lo que la valoración final sería salvadora en cuanto a intenciones (no está mal que se transmitan mensajes tan claros como el de esta película, criticando la política USA en el tema) pero floja en resultados, debido a lo cansino que se hace ya el género bélico, sin capacidad de aportar novedades visuales si no las ofrece argumentales (y en este caso sería ni lo uno ni lo otro).

LO MEJOR: Que nos transmita el claro mensaje de que EEUU se embarcó en la Guera de Irak sólo por intereses propios, y sin base certera para ello.

LO PEOR: No aporta ninguna novedad ni al género bélico ni al thriller, pecando además de un ritmo irregular y unas escenas de acción por momentos demasiado confusas (algo, de todas maneras, usual hoy en día).

1 comentario:

Trepamuros dijo...

Siendo de Paul Greengrass estaba cantado que las escenas de acción iban a ser puro tembleque. Recuerdo que en cine El Mito de Bourne fue un suplicio cada vez que había acción y, afortunadamente, en El Ultimátum pareció aflojar un poco, aunque aún así seguía siendo bastante incómodo. Es curioso, pero en pantalla pequeña, es decir en casa, estas escenas no marean tanto. En fin, menos mal que aún hay directores que no padecen de Parkinson voluntario.

Un saludo.